domingo, 23 de noviembre de 2014

EL GRAN OLVIDO Y CUANDO YA NO TE RECUERDE


Ayer me decías con tus labios llenos de amor: 

¡Te amo!

Al pasar el tiempo 

Te has olvidado de la palabra amor

Tus labios se callaron para quedar inmóviles en mi ausencia

Y un frio yerto se tragó con angustias mi esperanza


Hoy en esta noche de ausencia te escribo 

y te expreso como siempre, te amo... 

¿Te has olvidado de pensarlo o de escribirlo? 

Hoy cuando sientas mis cálidas palabras en tus oídos, 

y mañana cuando ya no pueda gritarlas siquiera al viento, 

te acordarás cuando yo tenía fuerzas para decirte te amo, 

y llorarás pensando cuan dulce y emotivo 

era escucharla de parte de mi voz... 


¿Amor, amor, amor porque te has olvidado 

de tan hermosa palabra que ya ni la mencionas? 


Hoy me llenas de tristezas abordado por tu abandono...

A pesar de ello y con lágrimas en mis ojos, 

te digo aguardando en mi soledad... ¡Te amo!...


Cuando pase el tiempo y todo haya quedado en el silencio, 

querrás oír de nuevo en mi boca esas seis letras, 

pero ya será demasiado tarde, 

me habré ido dejando detrás de mis huellas 

solo el susurro del viento olvidado...

INTENSIDAD
¡Ah! Me duele no haberte visto ayer
tus ojos inclinados en el crispar del viento
su turbión deshojando nube desgajada
sudando rocío, hojeando brisa viajera

Nada más me inclino aturdido ante su inocencia
sus pupilas se agitan cual hirviente agua
danza con algún sueño que despierta
juega con la arena húmeda de un mar dormido

Nada más puedo quedarme de una pieza
sus ojos brillan como un amanecer frenético
neblina que llora con brizna fugitiva
sueños que vuelven pintando la alborada

Nada más me quedo esperando el sonido
tus párpados cierran sus persianas finas
salta la noche columpiando luceros
yo meto la mano y nada localizo

Nada más ¿Qué voy a encontrar?

Si lo que busco ya no lo encuentro…

viernes, 19 de octubre de 2012

LA VELOCIDAD DE UNA FLECHA EN EL CORAZÓN



La velocidad de una flecha depende del arco, del material que está elaborado, si el estado físico del material es tenso, con una dureza elástica fuerte, las flechas al salir disparadas pueden ir como un saeta violenta muy ligera, incluso puede rasgar el aire, romperlo en partículas a su paso y dejar esquirlas del viento roto disgregado en todas direcciones. Una flecha con una punta con un buen acabado final de afilado y amolado, marchando a una velocidad de 250 Km/h podrá atravesar inevitablemente lo que consiga a su paso, bacterias, insectos, pequeñas cortezas de polvo y hasta a la misma luz podrá darle un corte perfecto y limpio. 

Si el hilo de despedida del disparo esta hecho de un material blando, lógicamente ira más despacio y hasta un insecto podrá rebotar y sobrevivir a su embestida desfavorable, el alcance puede ser quebrado y su blanco inútil, una tragedia insultante para el interprete o arquero. . 

Sin embargo, este disparo certero, planificado y con pericia, tendrá que tener otros motivos del material de la cuerda, su poder de tracción, calentamiento, estiramiento y de la energía inducida para catapultar con gran precisión el disparo soñado o anhelado. 

Entre estos parámetros coexisten: la postura del arquero, la mirada donde pongo el ojo pongo la flecha, las fuerza muscular tiene que ser muy activa, la posición de los dedos y de las manos debe ser muy municiona y tenaz, sin temblores, la posición de la cabeza debe ser eximida, el cerebro debe convertirse en un botón accionado para todo el cuerpo, los nervios deben de ser de acero puro, la altura del arco debe ser primordial y meticulosa, la nobleza de su estado físico, la robustez de su construcción y la fortaleza para soportar la jalada de la cuerda para la catapulta. 

Algunos Arcos suelen ser nobles y tienden a arraigar energía al doblarse un poco para afincarse con la cuerda de disparo, esto hace un engatillamiento honorable, arco y flecha se fusionan como esposo y esposa y con gran poder aceleran un proceso contundente y victorioso al disparar, el blanco será justificado y exacto, no habrá falla alguna y este anudamiento será recompensado con un éxito máximo y apreciable. 

Si el arquero es del genero de los domésticos podrá disparar una flecha entorno a los 150 km/h, si es regular o máster podrá catapultar a los 230 - 280 km/h y si es un profesional más de 280 km/h. Una persona que logre impulsar los 350 km/h seria bestial, y por último, inducir una flecha a la velocidad de Smith & Wesson Modelo 500, cuya dispara una bala de 26 gramos a 549 m/s o 1976 km/h, seria heroico, creo que ningún hombre lo lograría en el planeta, es imposible. 

Una flecha disparada a la velocidad de Smith & Wesson Modelo 500 traspasaría a un cuerpo humano, justo en su corazón limpiamente, el receptor no sabrá ni cuando la puntiaguda rama mortal le atravesaría, no rasgaría su carne ni un apéndice y al salir solo le dará un suave coletazo con su pluma timonera, incluso el delizarse entre la carne y tendones del recibiente, el tal sentirá un pequeño golpe sin rebotes o vibraciones, cuyo le produciría un infarto letal instantáneo, cerraría sus ojos y caería de bruces en manera violenta, mordería el polvo en segundos y quedaría yacente para no levantarse de nuevo. 

En los juegos olímpicos pasados la mayor velocidad alcanzada por una flecha fue de 240 km/h. 

Cley ha logrado la velocidad de una flecha disparada a la velocidad de la Smith & Wesson, Modelo 500 en mi corazón, su impacto ha logrado traspasarlo limpiamente y ha creado en sus fibras todo un amor tan intenso que me ha hecho caer de bruces ante ella y morder el polvo de su ternura… Qué hermoso y digno fue ser interceptado por la flecha de mi cupida Cley, es lo mejor que me ha sucedido…

Tan sencilla e ideal como la flor más primorosa de una primavera interminable, fogosa, ardiente como el sol del verano, dulce como las cristalinas aguas de un manantial de otoño, fresca como el amor y sus virtudes y certera como una flecha., así es Cley, siempre, siempre, siempre... 

GRACIAS DIVINO AMOR ESTOY VOLANDO


GRACIAS DIVINO AMOR
Gracias amor mío, me siento complacido en gran manera de tu dulzura y de tu querellante virtud, de tu encanto que perfila pasiones que me absorben, abordan y me enloquecen,  tu querer me hace olvidar las quimeras, la viejas melancolías y me encadenan a tu fresca ternura.
Hoy quiero sentirte plenamente a flor de piel, amarte intensamente hasta quedar exhausto, enterrado en los sentimientos más alborotados que podré despertar hasta ahora por mis sentidos, por ti valdría la pena volar sin tener alas, habitar entre la profundidad de tu vida y hacerla mía como lo más precioso y gustable, poseerte en un aquelarre blanco que hierva de sensaciones profundas,  donde no existan conjuros o sacrificios vanos, ni oscuridades o eventos místicos.
 Mi corazón te digiere con grosuras, con detalles inolvidables y necesarios, mi alma te ansia amada querida, mi bella dama, mi señora mía,  hoy vibras en la esencia de mi suspiro ardiente, en cada espacio de mi sistema nervioso, porque lo colapsas y lo liquidas, estoy que agonizo por ti querido amor, no puedo vivir si no estás, si no te acaricio, si no te hago mía las veces que sea preciso, sin ti nada, contigo todo...
¡Te amo!...

MI CORAZÓN ES COMO UN ROBLE MACHO



MI CORAZÓN ES COMO UN  ROBLE MACHO

El roble común es árbol robusto y puede llegar a una altura de 5 a 45 m, este árbol frondoso pertenece a la especie de la Familia: Fagaceae.  Entre la espesura crece con un tronco firme y sin ramificaciones hasta los 15 m. Cuando se halla aislado, su copa se hace ancha irregular con ramas tortuosas, nudosas y acodadas que proporcionan escasa sombra. Aunque su crecimiento es paulatino, salvo en condiciones favorables, crece hasta los 200 años y alcanza fácilmente los 600 años de vida.

Un roble después que cae a tierra, sobrevive durante años en su eterno descanso. Su madera es tan dura y de un hermoso color rojizo y de textura brillante, cuya jamás muere corrompida por la lluvia, la humedad constante, entre aguas, el sol, las inclemencias del deterioro gradual del ambiente o de los insectos y depredadores de la madera en putrefacción.

Al pasar el tiempo se cubre con un revestimiento de desechos ambientales,  cual se forma a su alrededor como un escudo protector que le cubrirá su viejo corazón durante siglos y es posible que llegue a fosilizarse si queda sumergido en tierras cálidas. El corazón viejo del Roble caído,  soportará todo tipo de inclemencia y sin perder una pizca de su belleza interna, continuará latiendo hasta después de miles años de haber fallecido.

Así es paso en mi corazón, estuvo cubierto con los desaires y heridas del pasado, pero siempre estaba intacto, fuerte y oloroso como el roble, su solidez era tan ancha y duradera que hoy aun después de tantos años, oculto bajo las sombras del olvido, Cley le ha encontrado y  lo ha limpiado de su escudo protector que lo mantenía sumergido en las ruinas de su tristeza y lo ha pulido con su amor, con sus detalles precisos, con sus palabras sentidas, con su amor verdadero, esa mujer se  ha hecho de mi corazón un árbol nuevo que late con sus latidos y camina con su vida…

Agradecido de tu amor, adorada mía…Mi Corazón de roble es tuyo, te pertenece.